La Iglesia de Santa María de la Atalaya fue un templo cristiano construido en Bermeo. Se encontraba en la zona más alta de la villa, sobre el acantilado. Esta ubicación, expuesta a las inclemencias del mar, conllevó su ruina y, finalmente, su derribo en 1783.
En el catálogo de Ganso y Pulpo, esta instancia aparece mencionada o citada, directa o indirectamente, en el siguiente texto: