El convento de Santa Teresa fue un edificio religioso de carmelitas descalzas construido en Madrid por Nicolás de Guzmán en 1684. Fue derribado en 1869, durante el sexenio revolucionario. En el lugar que ocupaba se abrieron las calles de Argensola, Campoamor, Justiniano y la ya existente Santa Teresa.
En el catálogo de Ganso y Pulpo, esta instancia aparece mencionada o citada, directa o indirectamente, en el siguiente texto: