El judío errante es una figura mitológica del imaginario colectivo occidental. Su origen suele remontarse a un hombre que se negó a dar agua a Jesús cuando iba camino de la cruz, hecho por el cual fue condenado por Dios a errar hasta el retorno de Jesús a la Tierra.
Sus variantes son numerosas y en el ámbito literario tuvo gran fama a partir de la novela folletinesca de Eugène Sue (1844).
En el catálogo de Ganso y Pulpo, esta instancia aparece mencionada o citada, directa o indirectamente, en los siguientes 3 textos: