Napoleón I Bonaparte (Ajaccio, Córcega, 1769 – Santa Elena, 1821) fue un militar y gobernante de Francia, general republicano durante la Revolución y el Directorio, artífice del golpe de Estado del 18 de brumario que lo convirtió en primer cónsul de la República el 11 de noviembre de 1799; cónsul vitalicio desde el 2 de agosto de 1802 hasta su proclamación como emperador de los franceses el 18 de mayo de 1804, y fue coronado el 2 de diciembre; proclamado Rey de Italia el 18 de marzo de 1805 y coronado el 26 de mayo. Ostentó ambos títulos hasta el 11 de abril de 1814 y, nuevamente, desde el 20 de marzo hasta el 22 de junio de 1815.
El inicio de su carrera militar podría fijarse en el sitio de Tolón. Durante un periodo de poco más de una década, tomó el control de casi toda Europa Occidental y Central mediante una serie de conquistas y alianzas. Entre sus grandes victorias se cuentan la batalla de Marengo (1800) y la batalla de Austerlitz (1805). Fue en 1808, tras conseguir reunir en Bayona a Carlos IV y Fernando VII (a quien después tendría retenido en Valencey), cuando intentó hacerse con el control político de la península ibérica, dando inicio a la guerra de la Independencia. Sin embargo, la oposición popular consiguió echar a las tropas francesas. No obstante, antes de conseguirlo, hubieron de tener por rey al hermano mayor de Napoléon: José I Bonaparte. Uno de los hitos en dicho periodo fue la batalla de Bailén. Entre los hombres que tuvo a su cargo en la campaña española se encuentran Augereau y el general Caulaincourt. Entre las numerosas batallas libradas bajo su mando, se cuenta la batalla de las Pirámides. Perdió definitivamente su guerra europea en la batalla de Waterloo el 18 de junio de 1815, resultando vencedor el ejército del Duque de Wellington.
También en 1808 ordenó la demolición de la Torre del Temple, por tratarse de un símbolo monárquico.
En el catálogo de Ganso y Pulpo, esta instancia aparece mencionada o citada, directa o indirectamente, en los siguientes 21 textos: