Ganso y Pulpo

Catálogo

  • Imagen de cubierta Corazón campesino

    Cuento donde la corazonada de una mujer salva a su familia del ataque de una envidia criminal.

    Son los primeros días de la primavera en uno de los pueblos que Matheu imaginó como representativos de las tierras aragonesas: Cañices. De pronto, comienza a repicar la campana mayor de la iglesia para dar la voz de alarma. Un repentino deshielo había hecho crecer las aguas de los afluentes del río Ebro y se esperaba que en unas horas quizás el pueblo y sus tierras aledañas sufrieran una espantosa inundación. La señora Justa, mujer de genio, se entera por su ahijada de la noticia, todavía a tiempo de ir por el camino en busca de su marido e hijo, que se encuentran sembrando cáñamo cerca del río. Por el camino se cruza con Atanasio, un joven del pueblo, que le asegura que va errada en su camino…

  • Imagen de cubierta Aguja, dedal, amor y compañía

    Cuento donde se analiza la vida diaria y futura del pelotón de modistas madrileñas.

    Este cuento comienza con el punto de vista de una joven modista desde el momento en que su madre la saca de la cama a las siete de la mañana para ir a trabajar. Tras esta presentación en primera persona, apenas mediada por el narrador, expuesta a base de pensamiento y diálogo, se apropia del relato una voz externa que analiza la realidad diaria de las que denomina «esclavas de la aguja». Muchachas jóvenes, de clase social baja o venida a menos, que se ven sometidas tanto a la avaricia y malos modos de la maestra del taller de costura como a la constante seducción y lisonjerías de galanes de medio pelo o viejos rijosos. De este modo, estas chicas se ven abocadas al vicio rápidamente, aspirando a los lujos de las que se pasean por la calle con criados y engañadas vilmente por los hombres, dado que la mayoría carecen de formación intelectual suficiente.

  • Imagen de cubierta Paraíso perdido

    Cuento donde la nostalgia y el desengaño refuerzan el mito del paraíso perdido.

    Feliciano se lamenta, mientras acaba de fumar en el balcón de su elegante hogar, situado en la segunda planta de una calle apartada, despreciando lo artificioso que la urbanidad ofrece, anhelando los silencios llenos de vida que ofrecen los entornos de la naturaleza. A pesar de haber sido criado por su tío con vistas a que acabara ejerciendo la carrera eclesiástica, sus éxtasis siempre se encontraron alejados del misticismo. Y si bien hubo un amor adolescente con una muchacha de la aldea de sus padres, pronto se volcó en su carrera musical. Tras veinte años, marcados por la sucesión natural de desengaños, Feliciano decide volver al pueblo y, entonces, la imagen de aquella muchacha, embellecida por la distancia y purificada por la muerte, no se aparta ya de él.

  • Imagen de cubierta El encierro

    Cuento donde un padre confiesa que su hijo paga una pena de cárcel injustamente.

    La disciplina carcelaria es estricta. Así lo demuestra el momento del encierro nocturno en las celdas del pabellón. Por eso, cuando el comandante se encuentra firmando las últimas órdenes del despacho del día y se presenta el cabo para informar de la presencia de un viejo que solicita poder ver a su hijo, no duda en mantenerse firme y determinar que, por mucho camino que haya recorrido el hombre, ya no es hora posible para comunicaciones y deberá esperar al día siguiente. De este modo, el hombre se dispone a pasar la noche con una manta y la espalda apoyada contra la pared. En el momento de la cena, la mujer del comandante insiste en la necesidad de una mayor piedad por parte de su esposo ante las penurias que le esperan en la noche al pobre hombre. La sorpresa se hace manifiesta cuando el comandante accede a recibir al viejo y escucha su confesión.

  • Imagen de cubierta El niño de París

    Cuento que narra desde el inocente punto de vista de una niña la muerte en el momento del parto.

    En casa de los señores de López hay bastante ajetreo. Entre el lujo de sus muebles y sus amplias habitaciones algo sucede. Así lo delatan los pasos apresurados de los sirvientes, yendo escalera arriba y abajo sin cesar por un momento. Con la llegada a la casa de la madre de uno de los propietarios conocemos a Laurita, la niña de la casa, que anda preocupada al no entender tanto trajín por una enfermedad de su madre. Su abuela la tranquiliza y marcha entonces a jugar con una muñeca en una de las salas de la casa. Ahí aparece por un momento el padre, que le informa de que pronto va a tener un hermanito. Para salvaguardar la inocencia de su hija recurre a la cándida fábula que afirma que los niños vienen de París. La confusión de la niña ante la realidad negada se pondrá en evidencia en el peor de los escenarios posibles.

  • Imagen de cubierta ¡Fanatismos!

    Cuento contra las posturas radicales y sectarias que narra un crimen satánico en el Madrid de 1823.

    Con la historia que trae en este cuento Florencio Moreno Godino pretende arremeter contra el fanatismo, cualquiera que sea su especia, patriótica o religiosa fundamentalmente. En su introducción ya deja clara, además, la idea de que «las pasiones humanas siempre son y serán idénticas por más que tomen diversas formas para manifestarse». Dicho esto, nos sitúa en el Madrid de Fernando VII, en la noche del 24 de julio de 1823, en víspera de la fiesta del apóstol Santiago, patrón de España. Tras presentar el ambiente festivo de las calles cercanas al palacio real, nos situamos en el convento de religiosas del Sacramento, donde esa noche se produce el rapto de su portera. Esta es llevada a un lugar donde está reunida una secta satánica. No volverá a haber noticias de ella hasta muchos años después.

  • Imagen de cubierta Florentina

    Cuento donde la juventud y el amor son la fuerza y salvaguardia de una joven muchacha.

    En este relato seguimos por las calles bulliciosas y elegantes del centro de Madrid a Florentina. Es esta una joven muchacha de lindo talle y andar desenvuelto, que apenas ronda los dieciséis años. Ello no impide que, mientras va por la calle a entregar su bolsa de ropa limpia a una clienta, los hombres se paren a mirarla… e incluso que la sigan. Es el caso de un viejo galán con aires de militar que, a pesar de su afán seductor, es incapaz de mantener el paso sin que le arda el pecho y le dé la tos. Es el caso de otro joven, poco agraciado en su físico, que intenta tentarla con promesas de dinero y trapos. Pero a ambos da la espalda sin dudar, recordando en su fuero interno a su novio. La juventud y el amor se demuestran motores de su existencia.

  • Imagen de cubierta El paraíso de los animales

    Cuento donde un hombre hipnotiza a su criado para que se manifieste su espíritu animal.

    Este es un cuento fundado en la teriantropía, la creencia de poder adoptar el espíritu de un animal. En este caso, ello es posible gracias al trabajo de un hipnotizador. Así se lo transmite don Heliodoro al protagonista y narrador del relato. Resulta que, empeñado en conocer el ideal de cada uno de los animales, este hombre se deja hipnotizar para dejar por escrito cuáles son esos posibles objetivos esenciales. Después de haber conocido su caso y leído las notas que de ello dejan constancia, el anónimo protagonista decidirá ponerlo en práctica con su criado Perico, un muchacho recién llegado de la aldea al que ha admitido a su cargo con el fin de convertirlo en un hombre. Al ver su felicidad bajo el influjo del espíritu del cerdo, se verá impelido a incumplir su propósito inicial.

  • Imagen de cubierta La mula y el buey

    Cuento de Navidad donde el amor prevalece sobre el enfado conyugal.

    Como cuentista de ocasión, Echegaray presenta en este texto un cuento de Navidad. Enmarcado en los puros y sencillos campos de la vida rural, comienza presentando el desarrollo de la cena de un matrimonio y una anciana mujer, madre de ella, durante la Nochebuena. Por una tontería, como lo es un plato que se ha ahumado, surge la disputa conyugal, con sus malas palabras y sus gestos feos. La anciana, sin embargo, sabe cómo acabar con la fricción de sus malos temperamentos. Para ello evoca una Nochebuena de muchos años atrás, cuando ambos eran niños. Una época plagada del amor y las buenas intenciones de los inocentes y de los espíritus sencillos; con su poco de belenes y su amplio abanico de diminutivos.

  • Imagen de cubierta Astronomía casera

    Cuento donde se ridiculiza la gorronería y mediocridad de un fraile.

    En este breve relato nos trasladamos hasta el Madrid del año 1829 para conocer a un fraile franciscano llamado Padre Ruperto. Este era un hombre de unos cuarenta años caracterizado por su campechanía y dominado por sus apetitos culinarios. Tanto es así que la mesa del convento se le quedaba pequeña, hecho que le llevó a darse por convidado recurrentemente en casa de una prima suya, casada con un maestro carpintero que poco a poco se iba hartando de la gorronería del primo de su mujer. Este, durante las comidas, hablaba a la familia de Historia, ciencias, viajes y otras cosas amenas y variadas. De este modo, acabó hablando de astronomía un día en el que se esperaba ver un eclipse de luna. Era el cuarto día seguido que se sentaba a la mesa del carpintero.

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad